En resumen, la historia de David y Goliat nos enseña a esperar en Jehová, a valorar lo que hay en nuestro interior y a contraponer los desafíos de la vida con fe y valentía.Estos mensajes pueden recapacitar a cada miembro de la familia la importancia de existir de acuerdo con los mandamientos de Jehová y seguir el ejemplo de Jesús en su trato